La Historia Militar goza de buena salud en el mercado editorial español. A ello contribuye decisivamente HRM ediciones, y así lo demuestra su apuesta por los historiadores militares nacionales o el trabajo con especialistas extranjeros, como es el caso en esta ocasión. HRM ha sido la editorial encargada de traer al español la obra que hoy tenemos entre mano y que aquí reseñamos: «En busca de la victoria decisiva». Un trabajo que hará las delicias de los interesados en los temas militares, pero también de aquellos cuyo interés sea acercarse a la realidad de la primera mitad del siglo XX desde una óptica diferente a la habitual.
Ficha técnica
- Título: En busca de la victoria decisiva: del punto muerto a la Blitzkrieg en Europa, 1899-1940.
- Autores: Robert M. Citino.
- Género: Historia Contemporánea, trabaja sobre el siglo XIX y, sobre todo, la primera mitad del siglo XX; la temática es militar.
- Nº de Páginas: 439.
- ISBN: 978-84-17859-40-4.
- Año: 2021.
- Cómpralo en la página oficial de HRM
Lo que opinamos en Archivos de la Historia
El volumen editado por HRM salió a la luz en 2002 en lengua inglesa. Sin embargo, estas (casi) dos décadas no le han sentado nada mal al volumen editado por HRM. De hecho, el propio autor da cuenta de ello en un prólogo exclusivo para el lector español. Analizando su obra de manera retrospectiva admite que fue un buen trabajo y que no ha perdido vigencia desde que se publicó, y lleva toda la razón. Como ya se ha mencionado en la ficha técnica, el autor de la monografía es Robert M. Citino, un profesor estadounidense especializado en Historia Militar. Dentro de ella se ha centrado en varios temas: el siglo XX, Alemania y el arte operacional. Son esos tres aspectos los que mejor resumen su producción historiográfica, de considerable extensión y significativo nivel.
En consecuencia, es uno de los historiadores militares más traducidos al español; antes que HRM, Crítica y Salamina se decidieron a traer sus títulos al español. Sin embargo, ninguna de las dos había apostado por el título que hoy tenemos entre manos, el cual en inglés se titula como «Quest for Decisive Victory: From Stalemate to Blitzkrieg in Europe, 1899-1940».
Desde muy pronto, el lector podrá comprobar que Robert M. Citino es un tipo con buena pluma y una cierta tendencia a la ironía que hace muy ameno su discurso. Ese es un aspecto común a toda la narración, otro de ellos es la organización de los capítulos: todos ellos cuentan con una introducción, un desarrollo más o menos en tono descriptivo y unas conclusiones finales que están orientadas a los aspectos valorativos. Que sea así también facilita la lectura y le aporta dinamismo. El tercer aspecto común a toda la obra es la temática, decididamente militar; casi exclusivamente militar, de hecho.
El libro rezuma barro, disparos de artillería y órdenes del generalato. La forma de narrar de Citino te hace trasladarte al campo de batalla, pero no como un soldado más, sino como un pájaro que lo ve en su totalidad. Y es que el autor se dedica, fundamentalmente, al estudio operacional ¿Y qué es eso? se preguntarán algunos con razón. El nivel operacional es aquel que se encuentra entre la estrategia, es decir, la forma que un bando tiene de ganar una guerra; y la táctica, el aspecto que atiende al modo de ganar una batalla. El modo en que un ejército logra la victoria siempre tiene mucho de operacional, por ejemplo.
A partir de esos tres aspectos, Citino construye su monografía cuyo campo de estudio se extiende desde fines del siglo XIX hasta las primeras operaciones de la II Guerra Mundial. A lo largo de ese periodo, el autor estudia una serie de conflictos, así como las discusiones teóricas que generaron, un aspecto de gran interés puesto que en aquel tiempo los ejércitos europeos estaban muy interesados en los más variados conflictos y su análisis, a partir del cual poder sacar conclusiones que les permitiesen prepararse del mejor modo posible. Lo hace con el objetivo de mostrar cuáles fueron las fórmulas elegidas para lograr la victoria decisiva, la causa por la que ello fue así y el resultado acontecido en el campo de batalla.
Una y otra vez los estamentos militares nacionales buscaron la fórmula para finalizar la guerra en la que se encontraban inmersos cuanto antes. Consideraban que el mejor modo para hacerlo posible era la batalla definitiva, como lo había sido en el pasado. El estudio de este aspecto es el elemento central de la obra, el que caracteriza la narración y las explicaciones aportadas, que se ciñen a ese propósito.
El autor comienza analizando el origen de la idea de victoria definitiva, que según él se encontraba en lo ocurrido en el siglo XIX. A ello se dedica el primer capítulo: «La Guerra en el siglo XIX: el colapso de la doctrina napoleónica». Comienza analizando brevemente las victorias decisivas de Napoleón; éstas dieron origen a una doctrina teórica que primaba las victorias decisivas sobre cualquier otra cosa y que tuvo una enorme influencia en la década decimonónica y también en el siglo XX. Sin embargo, conflictos como el de Crimea demostraron que la forma napoleónica de hacer la guerra era cada día más inviable.
Los siguientes tres capítulos destacan por ser conflictos que apenas han sido trabajados en español: la guerra boer, el conflicto ruso-japonés y las guerras de los Balcanes previas a la I Guerra Mundial (analizando sobre todo la primera). El estudio de estos tres conflictos es profundamente estimulante puesto que se sale de los guiones habituales. No son los más mediáticos, ni, a priori, los más importantes. Todo eso lo desbarata Citino con su aguda visión, demostrando que los tres conflictos aportaron conclusiones opuestas acerca de cómo serían las guerras del siglo XX y que dejó claro lo difícil que resultaba lograr la victoria decisiva. Además, con una visión que se aleja de la soberbia europea, analiza de un modo justo los éxitos y fracasos de los contendientes en todas ellas.
Así las cosas, llegamos a la I Guerra Mundial, a la cual se dedica un capítulo. Podría parecer que es insuficiente, que un conflicto de semejante tamaño no puede exponerse en un espacio tan corto, equiparable al utilizado para la guerra Boer. Pues no es así. De hecho, nos atrevemos a decir que quizá sea el mejor capítulo del libro. Analizando el conflicto en tres fases temporales, Citino nos descubre una guerra alejada de los tópicos. Las trincheras fueron una parte, solo una, de un periodo temporal específico. Ni toda la guerra fue de trincheras, ni todo el tiempo. Destaca especialmente su valoración de las soluciones propuestas para acabar con el punto muerto en el que se había metido la guerra buscando la victoria decisiva. La lectura es sensacional.
Los siguientes capítulos atañen al periodo de entreguerras. Uno de ellos se dedica de lleno a la cuestión teórica: cómo los diferentes países europeos discutieron y elaboraron nuevas doctrinas operacionales entre el 1918 y 1939. Buena parte de lo que ahí sucedió tuvo mucho eco en el siguiente conflicto, la II Guerra Mundial. Pero antes de dedicarse a dicha guerra, dedica otro capítulo a dos conflictos del periodo (de los muchos que existieron): la conquista italiana de Abisinia y la Guerra Civil Española. Lo hace debido a que ambas experiencias fueron analizadas sesudamente por los militares europeos en busca de lecciones de diferente tipo. Cabe señalar que la parte dedicada a la Guerra Civil española es muy interesante por realizar un análisis de este conflicto dentro de un marco general tan amplio como es este libro. De nuevo, actúa como acostumbra y se desmarca de tópicos y lugares comunes.
Finalmente, dedica el último capítulo a las primeras campañas de la Segunda Guerra Mundial. Con ellas cierra el círculo que había comenzado con las guerras napoleónicas al restaurarse la victoria definitiva. Tras muchas décadas y conflictos, un actor (Alemania) había conseguido restaurar lo que todos andaban buscando: el golpe decisivo. Llega a esa conclusión tras el análisis del Plan Amarillo –la invasión de Francia–, de su planificación y de su ejecución. Éste es un capítulo que puede sonarle a aquellos que hayan leído «El modo alemán de hacer la guerra». Pues tiene significativos puntos en común con él. Entre ellos, que analiza cómo los alemanes consiguieron volver a retomar su antigua tradición de atacar rápido, con fuerza y decisión, alcanzando la victoria tras abrasar al rival. Por lo tanto, el libro se cierra con la resolución de la cuestión, con el hallazgo de la victoria definitiva.
Entonces ¿Lo recomendamos?
El lector que haya llegado hasta aquí tendrá pocas dudas. Nosotros, no tenemos ninguna. Lo recomendamos sin dudarlo. El estilo ágil, la profundidad de los planteamientos, lo interesante de los temas tratados, la forma de relacionarlos… todo, todo ello hace que este sea un libro clave para cualquier interesado en la Historia Militar o el siglo XX. No vamos a negar que, en algunas ocasiones, es un libro para los muy cafeteros (cuando analiza, por ejemplo, los movimientos de cuerpos y sus posiciones geográficas). Pero Citino consigue que incluso esas partes sean muy amenas. De hecho, parte del éxito del libro reside en el hecho de hacer digestivos temas que difícilmente lo son. Además de acompañar esas narraciones con tramos completamente explicativos. Todo ello aderezado con chascarrillos, que también se agradecen.
Además de todo ello, señalar que la edición está cuidada, que el papel es de primera calidad, la letra es grande y legible, y la encuadernación es robusta. De tal modo, continente y contenido van de la mano dando lugar a una obra que tiene todo para convertirse en un must de la literatura sobre temas militares. En Archivos de la Historia lo tenemos claro, esperamos haber contribuido a que el lector de estas líneas también lo tenga.